Cadavedo

Asturias (1)

Busca por hotel o destino
Cuándo
How many are you
    • España (81)
    • Andorra (1)
  • Madrid (10)

  • Barcelona (10)

  • Cádiz (1)

  • La Rioja (3)

  • Murcia (5)

  • Salamanca (2)

  • Valencia (2)

  • Valladolid (2)

  • Almería (1)

  • Alicante (2)

  • Málaga (2)

  • Badajoz (1)

  • Navarra (2)

  • Córdoba (2)

  • Granada (2)

  • Albacete (1)

  • Álava (2)

  • Vizcaya (3)

  • Girona (1)

  • Guipúzcoa (2)

  • Zaragoza (1)

  • Toledo (2)

  • Castellón (1)

  • Sevilla (2)

  • Las Palmas (3)

  • Ávila (1)

  • Pontevedra (1)

  • Baleares (2)

  • Cantabria (1)

  • Lugo (1)

Hoteles ""

    Hoteles en ""

      Buscar por destino

        Elige fechas

        Habitaciones y huéspedes

        Número de habitaciones

        1

        Asturias: una apuesta segura al verde

        ¿Qué tiene Asturias que cuando la pisas quieres volver en el mismo momento en que la abandonas? Será que aquí se llena el “banduyu” (el estómago) como en ninguna otra parte; será esa “borrina”, esa niebla, que envuelve sus espectaculares paisajes; será el “búpili”, la alegría, la felicidad, que provoca el caminar por sus pueblos y ciudades. Será el bable, que suena tan cantarín y dulce que te atrapará para siempre. 

        Dicen de Asturias que es un paraíso. Créenos: cuando llegues a pueblos como Ribadesella, con su hilera de coloridas mansiones del siglo XIX bañadas por la playa de Santa Marina, lo entenderás. 

        También en Llanes, tan medieval y tranquila en su interior; tan brutal y agresiva en su playa de Cuevas del Mar. ¿Recuerdas esas bellísimas escenas de la película El Abuelo o El Orfanato? Fueron rodadas aquí. 

        Cudillero es el vértigo hecho pueblo. Verás cómo se encarama a una colina de la que, a modo de racimo de uvas, “van cayendo” casitas de colores, unas encima de las otras, hasta llegar al puerto. 

        No nos olvidamos de Cangas del Narcea, enclaustrado entre el Parque Natural de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias y la Reserva Natural de la Biosfera de Muniellos. ¿Eres celíaco? Ojo, porque acabas de llegar a todo un paraíso gluten-free: este pueblo, además de joya natural, es el primer Destino Sin Gluten certificado en España.  

        Y todavía no has llegado a sus ciudades. Un dato: no tienen nada que envidiar al rural. Y si no, que se lo digan a todos esos gijoneses que cada mañana, sea la estación que sea, se bañan en el Cantábrico, catan los mejores cachopos o echan la tarde en el barrio de Cimadevilla, de terraza en terraza, escanciando culines de sidra. 

        Cuando vengas a Asturias, pasa por la capital del Principado: Oviedo te está esperando con los brazos abiertos. Aquí podrás descansar en el fabuloso Sercotel Ciudad de Oviedo Hotel, a pocos pasos del casco antiguo. A su alrededor, modernidad, como el Auditorio Príncipe Felipe; y patrimonio histórico en la Catedral de San Salvador o en el ayuntamiento de la ciudad.  

        Playas salvajes en Asturias

        ¿Te atreves con el surf? Sea cual sea tu respuesta, pon rumbo a las playas de Asturias. Son puras obras de arte, iconos de atractivo natural y espacios de vida para un sinfín de especies de flora y fauna marina. Más de 200 playas en escasos 350 km de costa. 

        Por ejemplo, empieza por Llanes (máxima concentración de arenales bellos, con Poo, Ballota o Andrín), continúa por la playa del Silencio, donde será imposible que no emitas alguna onomatopeya de asombro; y remata con la de Cadavedo, antiguo centro ballenero.  

        ¿Quieres ser testigo de algo absolutamente único? Dirígete a Gulpiyuri y alucina con esta playa de interior, que no tiene salida al mar. Te preguntarás cómo es esto posible. Pues bien, el agua salada llega hasta aquí colándose bajo los acantilados. Por su belleza y particularidad, está catalogada como Monumento Natural. 

        Playa Silencio

        Asturias en sus más bellos senderos

        En el Principado se viene a caminar. Imposible no hacerlo cuando en su territorio se despliegan rutas como la Senda del Oso, que sigue los pasos de la vía férrea por la que hace siglos se transportaba el carbón. Te preguntarás… ¿pero se ven osos? Por desgracia, será difícil, aunque igual tienes suerte. 

        Lo que sí verás son vacas, y muchas, en los lagos de Covadonga. Desde aquí parten múltiples rutas, algunas de las cuales te llevarán al santuario de la Santa Cueva y, más allá, a las minas de la Buferrera y a los lagos Ercina, Enol o Bricial. ¡Cálzate las botas y caminar! 

        Sercotel Rewards

        Hazte miembro Rewards y consigue descuentos exclusivos